Dependemos del tiempo, y el tiempo me presiona. Respiro, respiro profundamente. Inhalo, contraigo el diafragma, expando los pulmones. Expiro, me desinflo, mi corazón bombea sangre a mi aurícula derecha, mi sangre oxigena mis células…
Mi mente ordena a mis impulsos nerviosos, ordena a mis pulmones que respire… y sigo respirando, bombeando, fotosintiendo la yerba en mis pies descalzos, electrificando mis sentidos nerviosos, favoreciendo las conexiones entre axón y dendritas.
Siento la brisa en mi cara y el calor del sol en mis manos tocando la guitarra, libero endorfinas a mi sistema nervioso. Es mi momento. (Lo presiento).
-Me siento bien-.
Me abrazo al mundo y él me abraza. (por fín correspondida).
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